Comienzo
este blog, con un sesgo un tanto egoísta, ya que utilizaré el mismo básicamente
como diario de trading. Como no tengo mucho tiempo (¿quién lo tiene?) iré
poniendo entradas según vaya pudiendo.
La vida
de un home trader (un trader individual, desde su domicilio) es un camino duro
y tortuoso, lleno de adversidades. Nada más que te dices un día “Quiero ser
Trader”, ya tienes encima la ya conocida cifra del 5%. Tan solo ese porcentaje
de los que lo intentan en todo el mundo, lo consiguen.
Pero al
mismo tiempo, esta extraña profesión te va cambiando como persona. Si te lo
tomas en serio ( y así debe de ser) verás cómo fluyen de ti cosas que
desconocías en tu ser. Desarrollarás aptitudes que te valdrán para cualquier
aspecto de la vida. En definitiva, vas a mejorar como persona.
Así que
señores, vamos allá.